Un testimonio de la tradición vinícola
En el corazón de Odollo, el lagar se erige como un símbolo del patrimonio vinícola y la tradición artesanal que ha caracterizado a esta región. Este lagar, como otros de su tipo en la comarca de Cabrera, se compone de dos espacios principales que reflejan la complejidad y el ingenio del proceso de elaboración del vino.
La zona de prensado: El corazón del lagar
El primer espacio es la zona de prensado, donde se realizaba la extracción del jugo de las uvas. Esta zona incluye dos elementos clave:
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El lagar de pisar: Aquí, las uvas eran pisadas para extraer el mosto, un proceso que requería esfuerzo físico y que marcaba el inicio de la elaboración del vino. Este método tradicional, aunque simple, era fundamental para liberar el jugo de las uvas antes de que la tecnología más avanzada fuera incorporada al proceso.
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La prensa de viga: Esta prensa, un elemento monumental del lagar, era utilizada para exprimir las uvas de manera más eficiente, extrayendo hasta la última gota de mosto. La prensa de viga de Odollo es particularmente impresionante, ya que se cuenta que ocho parejas de bueyes fueron necesarias para transportar la enorme viga hasta el lugar de construcción. Esta viga, pieza central de la prensa, demuestra la escala y la importancia de la producción vinícola en la región.
El tinajero: Donde el mosto se transforma en vino
El segundo espacio del lagar es el tinajero, un área destinada a almacenar grandes tinajas donde el mosto fermentaba lentamente, convirtiéndose en vino. Este proceso, que podía durar varias semanas o incluso meses, era crucial para desarrollar los sabores y características del vino que se producía en Odollo. Las tinajas de barro, que regulaban la temperatura y protegían el mosto de la oxidación, eran fundamentales para la calidad del vino final.
Un legado de esfuerzo y comunidad
El lagar de Odollo no solo es una estructura física, sino también un recordatorio de la dedicación y el esfuerzo colectivo de la comunidad. El transporte de la viga con la ayuda de múltiples bueyes simboliza la colaboración necesaria para construir y operar un lagar de esta magnitud. Además, este lagar es un ejemplo vivo de la economía local, donde la producción de vino no solo era una actividad comercial, sino también una parte integral de la vida social y cultural del pueblo.
Visitar el lagar de Odollo es una oportunidad para conectar con las raíces históricas de la vinicultura en la Cabrera, y para apreciar la artesanía y el esfuerzo que han sostenido esta tradición a lo largo de los siglos.